domingo, 31 de mayo de 2015

La caída de los precios del petróleo desde el último trimestre de 2014 afectó negativamente las finanzas del Estado venezolano. En 2015 estimamos que el precio promedio del barril del petróleo ronde los US$46,2bl, una disminución de US$42,6/bl en comparación con el precio promedio de 2014. Dado que el 96,3% de nuestras exportaciones son petroleras, esta caída de los precios reducirá para este año los ingresos en divisas en un 50,0% aproximadamente.

En un modelo productivo y diversificado la caída en el precio de venta de uno de sus bienes de exportación no tendría mayor impacto. Sin embargo, habida cuenta de la falta de diversificación del sector productivo venezolano, una caída, y además abrupta, en los precios de los bienes de exportación repercute drásticamente en la capacidad de respuesta del Estado ante sus compromisos externos (deuda externa) e internos (planes de inversión, gasto social, pasivos internos, entre otros).
En un escenario de caída de los ingresos en divisas, el financiamiento externo debería ser una opción viable para obtener los recursos necesarios para dar continuidad al modelo económico sin mayores ajustes. Sin embargo, en el caso de Venezuela esto no es una opción, debido a las altas tasas de rendimiento exigidas por los mercados internacionales a raíz del alto riesgo país.
Los reyes de la incertidumbre. El riesgo país es un indicador que refleja el riesgo inherente a cualquier transacción, operación y financiamiento de un país a otro, o dicho de otra forma, es un indicador que se usa para medir cuál es el riesgo de incumplimiento de pago frente a los tenedores de bonos soberanos.
El riesgo es el reflejo de la incertidumbre; mientras mayor sea la incertidumbre de un país, mayor será el riesgo asociado a sus operaciones. Entre los principales factores que toma en consideración este indicador se encuentran: el entorno económico, el entorno político, el marco institucional y la sinergia entre los diferentes actores de la sociedad.
En ninguno de estos aspectos Venezuela se encuentra bien posicionada, sobre todo en los últimos años en los que la actividad económica se ha visto mermada por las crecientes distorsiones generadas por el modelo económico-político.
El entorno económico del país no pinta nada bien. El año 2014 cerró con uno de los peores desempeños de la historia, observándose un escenario de estanflación. Por su parte, en 2015 la economía pasará a estar en lo que es conocido en la literatura como recesión estructural. Asimismo el déficit fiscal alcanzará el 16,8% del PIB, y el servicio de la deuda para este año se estima que ronde los US$10.121 millones (sin tomar en cuenta la amortización de créditos multilaterales).